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Crónica

3-0: El Almería se desahoga con el Nástic

Los rojiblancos se reencuentran con el triunfo con una goleada que pudo ser mayor. La permanencia, asegurada

El Almería se reencontró con la victoria después de cinco jornadas consecutivas sin ganar, y lo hizo goleando al Nástic de Tarragona por 3-0, aunque las diferencias en el marcador pudieron ser mayores por las muchas llegadas y ocasiones de los rojiblancos. Con este triunfo tan ansiado, el conjunto almeriense se desahoga en el campeonato, alcanza los 49 puntos y asegura la permanencia… eso sí, de manera virtual porque matemáticamente no es posible por los muchos puntos que restan en juego. En cualquier caso, es una cifra con la que ya se puede pensar en objetivos más altos, aunque habrá que esperar a que termine la jornada y dónde y cómo se encuentra el Almería.

Lo que son las cosas. Durante las cinco jornadas que nuestros representantes han estado sin vencer un encuentro, desarrollaron un brillante fútbol. En esta ocasión, sin embargo, ocurrió todo lo contrario; el juego no fue tan lucido como otras veces, pero el hicieron goles, que en definitiva es lo que marca las diferencias en este deporte.

El Nástic, que se jugaba la vida en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, tuvo mucha culpa de que el Almería no desarrollara sus mejores argumentos; de hecho los rojiblancos estuvieron durante los primeros minutos muy incómodos sobre el campo por la fuerte presión que ejercían los visitantes con las líneas muy adelantadas; un estilo semejante al de los almerienses por lo que el centro del campo parecía la “operación salida” de la Semana Santa. Los tarraconenses, además, pusieron mucha intensidad y agresividad, y todo fue mucho más complicado, como se esperaba.

El Almería, sin embargo, fue creciendo en el partido y pasó a tener mayor criterio con el balón, porque la posesión sí era suya. En el momento el que logró darle movilidad y ritmo a su juego, se plantó con claridad arriba. En el minuto 28 Corpas empalmó un rechace en la frontal del área y su “obús” se fue fuera por poco. Los rojiblancos iban a más, comenzaban a gustarse, y en el 34, tras una brillante salida de balón de Eteki, éste abrió para Juanjo Narváez que centró desde la izquierda y Alvaro Giménez, de cabeza, marcaba el 1-0.  En el 40 una nueva oportunidad, y en el 42, el 2-0 con los mismos protagonistas, centro de Narváez y remate, ahora con el pie, del “Pichichi” Álvaro Giménez. Con este marcador se llegaba al descanso.

El Nástic tenía que arriesgar y de salida en el segundo tiempo puso en liza a Kanté con lo que tenía tres delanteros arriba con Luis Suárez y Uche. Pero el Almería no le dio opción y a los cinco minutos de la reanudación, en el 50 de partido, hacía el 3-0 con brillantez. Corpas, que jugó de lateral derecho, pasó en profundidad sobre Álvaro Giménez, que sacó a su marcador e su posición para habilitar de tacón a Juan Carlos Real, que se internaba por el centro. Éste se llevó la asistencia de su compañero y batió al meta del Nástic.

A los tarraconenses les daba igual perder por tres o por cuatro, y buscaban meterse en el partido de alguna manera. Esta circunstancia dejó muchos espacios al Almería, que con rápidas transiciones de plantaba ante el portero Bernabé, pero a los rojiblancos se les fue la claridad de ideas para culminar las acciones. Demirovic que suplió a Álvaro Giménez, tuvo dos mano a mano con el meta del Gimnástic de Tarragona, pero no acertó; Corpas, en otra contra, mandó alto en una buena situación para marcar. Con los minutos pasando y con 3-0 en el marcador, la convicción ya no era la misma por el cansancio, tener el encuentro resuelto… argumentos que no fueron excusas para que Fran Fernández diera un tirón de orejas a algunos de sus jugadores en la rueda de prensa posterior a la confrontación.