1-0: Injusta derrota
El Almería hace méritos para sumar, pero termina cayendo de penalti
La UD Almería volvió a ver una historia repetida al caer derrotada con un tanto de penalti en Girona. Hasta ese momento, los almerienses habían hecho méritos como para haber ganado, pero una acción puntal acabó dejando a los rojiblancos muy tocados en el aspecto anímico por el hecho de volver a tropezar siendo presa de sus propios errores y, además, ver como se escapan casi todas las opciones del ascenso directo.
La primera mitad tuvo ritmo y alternativas. Los dos equipos intentaron imponer su juego, lo que derivó en que cualquiera de los conjuntos pudiera acercarse a la portería contraria tras cada recuperación. Eso sí, al menos durante en los compases iniciales, no habría demasiadas oportunidades de gol y solo destacaría una buena estirada de Fernando ante un tiro cruzado de Aday Benítez. Era el minuto 21.
El tiempo iba pasando hacia el descanso y daba la sensación de que el aspecto físico del Almería estaba un punto por encima. En esas, nuestros representantes gozaron de una buena opción en la que Darwin remató un saque de esquina y el cuero se marchó rozando el poste. Maras entraba por el segundo palo y no llegó por centímetros a esa pelota antes de que se fuera.
Ya en la segunda mitad, la UD Almería dio un paso adelante en su propuesta de juego. Los almerienses fueron quienes mejor volvieron tras la reanudación y una buena muestra de ello fue una jugada individual de Darwin Núñez en la que el portero del Girona tuvo que esforzarse para evitar el gol.
Con más posesión por parte de los visitantes y presencia en la zona ofensiva, el cuerpo técnico decidió meter refresco con las entradas de Appiah y Francis, que ocuparían los lugares de Romera y Lazo. Precisamente, el futbolista natural de Sanlúcar de Barrameda sería protagonista instantes antes de la sustitución con un chut desde lejos detenido por Riesgo.
Pero cuando la situación parecía que estaba más cerca de que los almerienses siguieran dominando se vivió un ‘déjà vu’ en el momento en el que se decretó un penalti cometido por David Costas. Corría el minuto 75 y los pequeños detalles volvían a tener al Almería por debajo en el marcador después de que Stuani no perdonara y pusiera su nombre al 1-0 desde los once metros.
Una vez más, nuestros representantes estaban penalizan sus propios errores en forma de un marcador injusto en relación a lo que se estaba viendo en el fútbol. Así pues, en la recta final al Almería se le notaba tocado anímicamente y, pese a que desde el gol hasta la conclusión el desarrollo del duelo se realizó en la zona defensiva del Girona, nada pudo evitar una derrota que deja casi imposible el ascenso directo.