0-1: El Almería, un querer y no poder
Los rojiblancos acusaron en el primer tiempo el gol del Racing en el minuto 15. En el segundo mandaron, pero no pudieron resolver
La UD Almería no pudo reencontrarse con el triunfo y encadena la segunda derrota consecutiva como local, además de que tan sólo ha sumado un punto de los últimos nuevo en juego, después de un partido espeso. Nuestros representantes tuvieron en frente a un Racing de Santander ordenado atrás, que se adelantó pronto y cerró sus filas para impedir acercamientos que derivasen en que se rompiera el 0-1 definitivo.
Aunque el conjunto rojiblanco intentó llevar la iniciativa en los primeros minutos, los cántabros, que estrenaban a José Luis Oltra en el banquillo, estaban bien plantados y complicaron las conexiones almerienses en la parte de arriba. En el minuto 14, los visitantes se adelantaron en el marcador por medio de Cejudo, que se metió entre los centrales para controlar un balón y batir a Fernando.
Los rojiblancos acusaron el gol tempranero y se tradujo en imprecisiones sin poder generar peligro sobre la portería de Luca Zidane. Además, el Almería tuvo que controlar la zona defensiva porque el Racing sorprendía con velocidad, al margen de disponer de mayor posesión porque los de José María Gutiérrez le daban esa opción. De hecho, los buenos momentos de los visitantes estuvieron a punto de convertirse en un penalti a favor. Sin embargo el VAR advirtió al colegiado de que no había nada y la pena máxima no se lanzó.
José María Gutiérrez decidió introducir un doble cambio en el arranque del segundo tiempo. Juan Muñoz y Vada entraban por Appiah y Aguza, lo que provocó un cambio de dibujo, también, que dió más ritmo y verticalidad hasta el punto de que comenzaban a producirse acciones de peligro.
El Almería convertía este período en un monólogo, mandando, llevando la iniciativa y llegando arriba, aunque sin poder resolver; en unas ocasiones por las buenas intervenciones del meta y de los defensores del Racing, que se hicieron fuerte atrás, en otras por errar en el último pase fruto de la ansiedad porque el tiempo pasaba y el marcador pesaba mucho… muchísimo. Además los visitantes supieron jugar sus bazas y parar el encuentro para atender a jugadores con molestias.
Con estos argumentos el resultado no se movería y los rojiblancos… y la afición, terminaban desolados por este nuevo tropiezo ante un colista que sorprendió. A pesar de todo, el Almería va a seguir segundo en la clasificación.